Los siguientes puntos deben ser tenidos en cuenta a la hora de analizar las consecuencias de este ambicioso proyecto de la empresa ENDESA avalado por el gobierno chileno y el silencio de cancillería argentina:
El gran sismo chileno acontecido recientemente y cuyo epicentro se localizó millas adentro en el océano pacifico, derribó edificios en el centro del país trasandino, sacudió gran parte de la Patagonia Argentina, cambio el eje de rotación terrestre y movió de lugar Buenos Aires (agregar cuanto). Esta vez, un terremoto de igual magnitud podría producirse de este lado de la Cordillera de Los Andes, en el sector conocido como “Cordón de Fuego” de acuerdo a los mas de 100 volcanes activos que posee y que están unidos bajo la corteza terrestre por fallas geológicas.
El fenómeno científico llamado Sismicidad Inducida (causa artificial de terremotos) agravará la posibilidad de ocurrencia de movimientos telúricos en nuestro país. La Sismicidad Inducida por embalses, ha provocado terremotos de hasta 6 grados en áreas asïsmicas y es objeto de estudio irrefutable en todo el planeta.
La zona de Río Puelo no solo es sísmica sino también volcánica, y el lago artificial de la represa ENDESA, llamada “El Portón” quedaría establecido sobre la falla geológica activa Liquiñe-Ofqui (con actividad magmática desarrollada), cuyas ramificaciones son mayores a las de la Falla de San Andres. Sumando la existencia de la fractura Liquiñe-Ofqui bajo la cuenca binacional del Río Puelo, que nace en el lago homónimo en Chubut y desemboca en el Océano Pacifico en Chile, al fenómeno Sismicidad Inducida y, teniendo en cuenta que Liquiñe-Ofqui fue epicentro de temblores acaecidos en la región patagónica argentina tras la erupción del volcán Chaiten, y mas tarde fuente de las replicas del gran terremoto chileno, las probabilidades de sismos de gran magnitud que “El Porton” podría ocasionar en nuestro país harían, sin lugar a dudas, tambalear el obelisco.
Fuente: bolsonweb.com
El gran sismo chileno acontecido recientemente y cuyo epicentro se localizó millas adentro en el océano pacifico, derribó edificios en el centro del país trasandino, sacudió gran parte de la Patagonia Argentina, cambio el eje de rotación terrestre y movió de lugar Buenos Aires (agregar cuanto). Esta vez, un terremoto de igual magnitud podría producirse de este lado de la Cordillera de Los Andes, en el sector conocido como “Cordón de Fuego” de acuerdo a los mas de 100 volcanes activos que posee y que están unidos bajo la corteza terrestre por fallas geológicas.
El fenómeno científico llamado Sismicidad Inducida (causa artificial de terremotos) agravará la posibilidad de ocurrencia de movimientos telúricos en nuestro país. La Sismicidad Inducida por embalses, ha provocado terremotos de hasta 6 grados en áreas asïsmicas y es objeto de estudio irrefutable en todo el planeta.
La zona de Río Puelo no solo es sísmica sino también volcánica, y el lago artificial de la represa ENDESA, llamada “El Portón” quedaría establecido sobre la falla geológica activa Liquiñe-Ofqui (con actividad magmática desarrollada), cuyas ramificaciones son mayores a las de la Falla de San Andres. Sumando la existencia de la fractura Liquiñe-Ofqui bajo la cuenca binacional del Río Puelo, que nace en el lago homónimo en Chubut y desemboca en el Océano Pacifico en Chile, al fenómeno Sismicidad Inducida y, teniendo en cuenta que Liquiñe-Ofqui fue epicentro de temblores acaecidos en la región patagónica argentina tras la erupción del volcán Chaiten, y mas tarde fuente de las replicas del gran terremoto chileno, las probabilidades de sismos de gran magnitud que “El Porton” podría ocasionar en nuestro país harían, sin lugar a dudas, tambalear el obelisco.
Fuente: bolsonweb.com
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